viernes, 10 de marzo de 2017

con la vieja

Recuerdo muchas veces una comida con un grupo de lo que se denomina "nueva museología".

Recuerdo esos días. Se aprende mucho de cómo se las tienen que ingeniar por ahí la gente, por muchos países del mundo donde las estructuras del poder, de la administración o de las relaciones humanas poco tienen que ver con la Europa que conocemos.

También recuerdo como al final, como anfitriones, nos tocaba bailar con lo políticamente correcto.

En una comida un compañero se me acercó y me dijo: Víctor, si esta es la nueva museología yo casi que me quedo con la vieja.

Porque despreciar lo viejo como malo no siempre es lo más sabio. Se supone que para construir, para pensar, para avanzar, debemos de ir poniendo ladrillos, reestructurando vigas y pilares maestros para alcanzar una meta que debe ser la mejor para todos.

Pues algo parecido pasa con la Educación. Parece ser que, para algunos, la modernidad pasa por destruirlo todo. La Educación es algo violento, de un sistema que quiere educar "en" el sistema. Pero también es un germen de los que luego vendrán. Y no me parece que lo lógico sea construir derribando todo el muro, sin rescatar al menos aquellos ladrillos que, a algunos, tanto nos enseñaron.

Y me viene entonces a la mente aquella frase, porque, dependiendo de qué tipo de Educación se hable yo, en algunos aspectos... me quedo con la vieja.

Salud.

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